El peregrino, siempre en busca de trascendencia, espiritualidad profunda y meditación, tras cambiar de montura (entiéndase que hablamos de transporte) retoma el camino. Y el camino llévale ahora hacia el noreste, pero mucho más allá de la polonia doméstica: a la Polonia auténtica y profunda... a una ciudad llamada Opole
Pero antes, la hispánica huelga obliga al peregrino a adelantar una jornada la partida, para llegar, y dar descanso a sus molidos huesos, a la muy católica ciudad de Cracovia.
Según documentación remitida por nuestra compañera y jefa de expedición, coordinadora del Proyecto, el primer pase pernocta lo consumiremos en este céntrico hotel intitulado Pergamin. Céntrico, limpio, con Wifi, y una arquitectura clásica propia del Imperio Austro-húngaro...lo que realmente preocupa es la escasísima separación entre camas, a todas luces insuficiente...
Ante esta perspectiva alarmante, el peregrino sopesa seriamente pasar esta primera velada en vela en el bar del hotel. A tal fin, se pertrecha con las primeras nociones de polaco:
dos cervezas por favor - proszę dwa piwa (proshe dfa pifa)
¿dónde están los servicios? - gdzie jest toaleta? (gzie iest toaléta?)
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1 comentario:
¿Cómo se va a llamar el periplo? ¿Come reza y pedalea?
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